Maya es de Peñaranda. La echaron a la calle a ella y a sus dos crías y como es totalmente casera, hubo quien jugó a hacerle daño. De hecho, tiene perdigones en la cabeza.
Maya tiene derecho a tener un hogar definitivo – En sus dos añitos de vida no ha encontrado mucho amor pero seguro que su suerte está a punto de cambiar .
Un adoptante para Maya
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