Sira y Lana ya están en su nueva casa, con Arancha, Felipe, su hija y sus nuevos amigos perrunos.
Arancha y Felipe han esperado pacientemente ha que se curaran bien de la sarna y, después, a que tuvieran todas sus vacunas . Estaban impacientes por tenerlas en su hogar pero sabían que lo mejor para las cachorritas era estar bien atendidas sanitariamente antes de trasladarlas. Porque no deja de ser estresante para ellas.
Y como buenos amantes de los animales, antepusieron el bienestar de las perrinas a cualquier otra consideración.
Hoy ya están todos juntos y bien felices.
Muchas gracias familia